La Mujer detrás de Zimendi: Un Relato de Superación y Éxito

¡He aprobado el EGA! Era el año 2012. Además, coincidió con la convocatoria de oposiciones en todas las ramas de Educación Infantil. Llevaba más de 20 años esperando la oportunidad de cumplir mi sueño: ser profesora de Primaria. Sin embargo, el destino tenía otros planes para mí. En marzo de 2012, con el tema listo para exponer ante el tribunal, Carlos, fundador de Zimendi (mi marido), perdió la vista; ya no podía conducir ni trabajar. Su vida iba a cambiar, y la mía también.

Dejé a un lado mi sueño y me enfoqué en Zimendi, nuestra inmobiliaria. Durante varios años, trabajé a la sombra de Carlos, ocupándome de la parte administrativa y documentación. En el área comercial, mi labor se limitaba a seleccionar pisos y clientes para que otros comerciales los mostraran y vendieran. La selección solía dar buenos resultados; «tenía buen ojo». Aunque en ocasiones vendí alguna propiedad, fue de manera puntual. A pesar de mi timidez, atender a los clientes que visitaban la oficina no suponía un problema; lo hacía bien. Sin embargo, la gestión de ventas me intimidaba; para mí, era agotador emocionalmente. La venta no era «lo mío».

Pero las circunstancias me llevaron a asumir la dirección del negocio familiar, Inmobiliaria Zimendi, lo cual suponía un esfuerzo y agotamiento emocional porque no me veía capacitada. Llegaba a casa cada día exhausta, agotada, pero lo hacía. Puedo decir que enfrentarme a todo lo que suponía Zimendi, en mi dificultad, me ha hecho una mujer más fuerte; fui capaz de hacer algo que se me dificultaba. Han pasado 12 años y estoy al frente de Zimendi, con un buen equipo, por supuesto, pero llevando la carga y también vendiendo. Incluso, estuve sola en el negocio durante seis meses, encargándome de todo, desde la captación hasta la venta y la gestión. Me superé a mí misma y me sorprendí de lo que soy capaz de hacer.

Lo ideal es trabajar en algo que te guste, que haga placentero ir al trabajo a pesar de las dificultades. Pero a veces, los desafíos difíciles te hacen crecer y te demuestran que vales más de lo que crees. Es por ello que en Zimendi entendemos que las dificultades son una etapa de crecimiento.

Cuando futuros propietarios, ya sean padres, madres o parejas jóvenes, cruzan la puerta de nuestra inmobiliaria en busca del lugar perfecto para construir su hogar, nos maravillamos con el esfuerzo y la dedicación que invierten en transformar sus sueños en realidad. En Zimendi no nos conformamos con entender, sino que celebramos cada paso de esta emocionante travesía. Queremos ser cómplices en esta etapa de crecimiento, donde superar desafíos se traduce en alcanzar sus más anhelados deseos.

Comprendemos a la perfección lo intrépido que puede ser emprender un nuevo camino. Por ello, cuando un emprendedor decide dar vida a su negocio y visita nuestra oficina en busca del espacio ideal, en Zimendi nos entusiasma ser el impulso que necesitan. Estamos aquí para ayudarles a superar cualquier obstáculo que surja, proporcionándoles el respaldo necesario para dar vida a su empresa.

En Zimendi, no solo somos expertos inmobiliarios, sino también compañeros de viaje en la realización de tus sueños. Ya sea encontrando ese acogedor piso que te haga sentir «en casa» o el local perfecto para iniciar tu negocio, queremos ser parte activa de cada paso que te acerque a tu éxito. Estamos aquí para acompañarte y facilitarte el camino hacia la creación de tus aspiraciones.